El jabón potásico es un insecticida y acaricida que combate eficazmente al pulgón, la cochinilla, la mosca blanca, los trips y la araña roja, entre otros.
No es tòxico. Este plaguicida ecológico actúa por contacto; reblandeciendo la cutícula protectora de los parásitos, que utilizan además para respirar.
No daña a otros insectos beneficiosos como las abejas o sus propios predadores naturales, útiles también para controlar la plaga.
Este plaguicida no entra en la planta (no es sistémico) y se degrada rápidamente, por lo que no requiere plazo de seguridad.
Tiene un efecto limpiador sobre las hojas: lava los residuos generados por los insectos, evitando la aparición de la negrilla.
Es útil para combatir este hongo al inicio de la infección.
Es biodegradable e inocuo. Es fuente de potasio para las plantas.
El mejor momento para realizar el tratamiento será a la salida o la puesta del sol, en ausencia de viento y de lluvia que lave la aplicación. Serán convenientes varios tratamientos para controlar la plaga.
Lo ideal es repetirlos entre 3 y 4 veces, dejando una semana de descanso entre ellos.
El jabón potásico es un insecticida y acaricida que combate eficazmente al pulgón, la cochinilla, la mosca blanca, los trips y la araña roja, entre otros.
No es tòxico. Este plaguicida ecológico actúa por contacto; reblandeciendo la cutícula protectora de los parásitos, que utilizan además para respirar.
No daña a otros insectos beneficiosos como las abejas o sus propios predadores naturales, útiles también para controlar la plaga.
Este plaguicida no entra en la planta (no es sistémico) y se degrada rápidamente, por lo que no requiere plazo de seguridad.
Tiene un efecto limpiador sobre las hojas: lava los residuos generados por los insectos, evitando la aparición de la negrilla.
Es útil para combatir este hongo al inicio de la infección.
Es biodegradable e inocuo. Es fuente de potasio para las plantas.
El mejor momento para realizar el tratamiento será a la salida o la puesta del sol, en ausencia de viento y de lluvia que lave la aplicación. Serán convenientes varios tratamientos para controlar la plaga.
Lo ideal es repetirlos entre 3 y 4 veces, dejando una semana de descanso entre ellos.